Para un correcto diagnóstico y tratamiento del asma bronquial es esencial contar con un equipo multidisplicinar (neumólogos, alergólogos y, en ocasiones, otorrinolaringólogos y gastroenterólogos).
Será necesario realizar varias pruebas diagnósticas, dependiendo de la historia clínica y de la exploración física.
Dentro de la historia clínica, los síntomas fundamentales se refieren a la presencia de tos irritativa, expectoración mucosa, sensación de opresión torácica, disnea de esfuerzo y sibilantes. Deberán valorarse los antecedentes familiares y personales de atopia. En la exploración física, la auscultación pulmonar presenta sibilantes finos difusos, muchas veces polifónicos y de predominio espiratorio.
Las pruebas diagnósticas que realizamos son:
- Prueba de provocación con metacolina
- Espirometría con prueba de broncodilatación
- Prueba de provocación con ejercicio con inhalación de aire frío
- Pruebas radiológicas (generalmente radiografías) del tórax y de los senos paranasales
- Exploración otorrinolaringológica
- PH-metría esofágica
- Pruebas de alergia
Contamos con equipo Multidisciplinario para Asma Crónico
En los últimos años se ha demostrado que el tratamiento de la inflamación de la mucosa bronquial es la parte más importante del tratamiento del asma.
Existen diversos medicamentos que tienen efecto antiinflamatorio en la mucosa bronquial, pero los más potentes y eficaces son los corticoides (cortisona) inhalados.
Para el tratamiento inmediato, se utilizan broncodilatadores, que normalmente se administran por vía inhalatoria.
Existen dos tipos fundamentales según la duración de su acción: los broncodilatadores de acción prolongada, que se toman por la mañana y por la noche todos los días, se tengan o no síntomas; mientras que los de acción corta, se suelen reservar para tomar en caso de necesidad (sensación de ahogo, tos, etc).
En pacientes en los que se demuestra un componente alérgico, el tratamiento con antihistamínicos puede ser beneficioso.